Una comunidad unida por la esperanza: continúa la intensa búsqueda del pequeño Roldany Calderón en Manabao
La comunidad de Manabao, en Jarabacoa, vive días de angustia e incertidumbre tras la desaparición del pequeño Roldany Calderón, de apenas tres años, cuyo rastro se perdió el pasado 30 de marzo. Desde entonces, las labores de búsqueda no han cesado ni un solo instante.
Equipos especializados de la Defensa Civil, fiscales, unidades caninas, cazadores del Ejército, y otros organismos de emergencia se han sumado al operativo, desplegado por tierra y con técnicas cada vez más minuciosas.
También se incorporaron expertos en planimetría de la Policía Nacional, quienes analizan cada palmo del terreno en busca de pistas que puedan conducir al menor.
En medio de la investigación surgió una declaración que ha generado inquietud. Un joven, hijo de la dueña de la vivienda donde estuvo el niño por última vez, afirmó en una entrevista que “los padres saben lo que pasó” y sugirió que “se lo llevaron”, insinuando que el caso podría no tratarse de una simple desaparición. Asegura además que fue presionado por las autoridades durante los interrogatorios.
La comunidad no ha quedado al margen: vecinos y voluntarios han mostrado una solidaridad ejemplar, brindando alimentos, alojamiento y apoyo logístico a los rescatistas.
La esperanza no se pierde, y cada rincón del accidentado terreno de Manabao está siendo revisado con rigor y determinación.
Mientras las autoridades mantienen en reserva sus principales hipótesis, han dejado claro que la búsqueda continuará “hasta agotar todas las posibilidades”. El caso de Roldany ha calado hondo en el corazón del país, que sigue atento y con el deseo compartido de que el pequeño regrese sano a los brazos de su familia.
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