David Ortiz, ex estrella de los Medias Rojas de Boston y miembro del Salón de la Fama, ha compartido su descontento con el exjugador Emilio Bonifacio, revelando detalles sobre una disputa que ocurrió durante un evento en los Estados Unidos.
Ortiz explicó que lo que inicialmente comenzó como una relación profesional entre ambos terminó con Bonifacio perdiendo el respeto de Ortiz.
Según el relato de Ortiz, la situación surgió cuando Bonifacio, quien en ese momento era parte del equipo, comenzó a mostrar actitudes difíciles durante los eventos. Ortiz destacó que Bonifacio, que en ese entonces tenía un papel clave como capitán, era impredecible y cambió sus decisiones de manera repentina, lo que afectó la dinámica del equipo.
En un evento en particular, Bonifacio, sin previo aviso, decidió no asistir a ciertas actividades, lo que causó molestia en los compañeros de equipo, especialmente en Ortiz. Según el exjugador, estas actitudes reflejaban una falta de compromiso y responsabilidad con el grupo, lo que fue difícil de aceptar, considerando la importancia de un líder en ese rol.
Ortiz explicó que para él, ser capitán no solo implicaba desempeñar un rol en el campo, sino también tener una actitud profesional y coherente fuera de él. Bonifacio, al mostrar estos cambios repentinos de actitud, socavó el liderazgo que se esperaba de él. Este comportamiento generó una fractura en la relación entre ambos jugadores.
El ex pelotero de los Medias Rojas aclaró que nunca tuvo un conflicto personal con Bonifacio, pero su actitud profesional en ese momento fue algo que no pudo tolerar. Ortiz consideró que para cualquier líder es esencial poder contar con el apoyo y el compromiso total de sus compañeros, especialmente en los eventos que involucraban al equipo.
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Ortiz también subrayó que en los deportes profesionales, el respeto entre jugadores es fundamental para el buen funcionamiento del grupo. La falta de fiabilidad de Bonifacio en esos momentos hizo que Ortiz perdiera la confianza en él, lo que a su vez afectó su respeto hacia él como líder del equipo.
Aunque Ortiz reconoció el talento de Bonifacio como jugador, destacó que la actitud es un factor determinante para crear un ambiente de equipo exitoso. Este tipo de comportamientos pueden tener repercusiones más allá del campo de juego, ya que un equipo bien unido requiere de una mentalidad profesional de todos sus integrantes.
En resumen, David Ortiz expresó que la falta de compromiso y la actitud inestable de Emilio Bonifacio en los eventos de equipo fue lo que llevó a la pérdida de respeto y confianza por parte de Ortiz. Aunque ambos pudieron haber tenido un buen desempeño en el campo, la actitud fuera de él fue lo que marcó la diferencia en su relación profesional.