La desaparición del pequeño Roldany Calderón en Manabao, Jarabacoa, ha generado una gran movilización en la comunidad y en las autoridades locales.
El niño, de apenas tres años, fue visto por última vez el domingo en una zona cercana al Parque Nacional José Armando Bermúdez, donde su familia disfrutaba de un pasadía. Desde entonces, la búsqueda no ha cesado, con la esperanza de encontrarlo sano y salvo.
Según testimonios, Roldany estaba jugando con otras niñas antes de desaparecer.
Niña revela lo que hiso con Roldany
Una de ellas contó que lo llevó con su padre, quien se encontraba en la cocina. Minutos después, cuando su padre regresó al patio donde lo había dejado, el niño con las niñas ya no estaba. La desaparición ocurrió en un área montañosa y de difícil acceso, lo que ha complicado las labores de búsqueda.
Desde la tarde del domingo, decenas de voluntarios y rescatistas han recorrido fincas, cultivos y el río más cercano en un esfuerzo incansable por dar con su paradero. La alerta se emitió a las 5:20 p.m., lo que dio inicio a un operativo que no ha parado desde entonces. Equipos de rescate han trabajado sin descanso, apoyados por la comunidad, que ha mostrado una gran solidaridad con la familia.
Hasta el momento, no se ha encontrado ninguna pista concreta sobre el paradero del niño, lo que ha llevado a las autoridades a ampliar la búsqueda a otras áreas más alejadas. La incertidumbre ha generado angustia en la familia y en los habitantes de la zona, quienes han mantenido la esperanza de hallarlo con vida.
Los padres de Roldany, Carolina Vargas Ureña y Efraín Nicolás Calderón, están desesperados y han pedido ayuda a cualquier persona que pueda aportar información. Mientras tanto, las autoridades han hecho un llamado a la población para que se una a las labores de rastreo y brinde cualquier dato que pueda ser clave en la investigación.
Se espera que en las próximas horas más equipos especializados se sumen a la búsqueda, reforzando el operativo con tecnología y estrategias más precisas. La comunidad sigue atenta a cualquier novedad, con la esperanza de que el niño pueda ser encontrado pronto y regresar con su familia.
