Wander Franco, una de las jóvenes promesas del béisbol de Grandes Ligas y figura destacada de los Tampa Bay Rays, vio su carrera interrumpida por un escándalo que impactó al mundo del deporte.
El motivo de su suspensión se relaciona con su presunta relación con una menor de edad, identificada como Pamela Infante. Este hecho desató una investigación tanto por parte de la Major League Baseball (MLB) como de las autoridades judiciales en República Dominicana.
Según informes, cuando Franco comenzó su relación con Pamela Infante, ella era menor de edad, lo cual constituye una grave violación tanto legal como ética. A raíz de estas acusaciones, el pelotero fue suspendido indefinidamente y su situación legal aún está en curso.
Hasta la fecha, el caso se mantiene bajo investigación judicial, sin una resolución definitiva. Esta situación ha dejado en pausa su carrera profesional y ha generado un debate sobre la responsabilidad y el comportamiento de los atletas fuera del terreno de juego.
De protagonista del escándalo a tiktoker
Mientras tanto, Pamela Infante ha ganado notoriedad pública y se ha convertido en una figura activa en redes sociales. En particular, se le ha visto realizando transmisiones en vivo a través de la plataforma TikTok, donde interactúa con sus seguidores y, en algunas ocasiones, les solicita apoyo económico mediante regalos virtuales.
Esta exposición ha generado distintas opiniones en redes: algunos la critican por aprovechar la situación para ganar fama, mientras que otros argumentan que está buscando una nueva forma de sustento tras el escándalo.
Pamela parece haber encontrado una vía para generar ingresos independiente de Wander Franco. Su presencia en TikTok ha crecido, lo que indica que está enfocada en convertirse en influencer digital, un camino cada vez más común entre jóvenes que buscan monetizar su imagen y notoriedad.
No obstante, su asociación con el caso de Franco sigue siendo un elemento central en la percepción pública que se tiene de ella.
El caso continúa atrayendo la atención de los medios, tanto por el impacto que ha tenido en la carrera de uno de los jugadores más prometedores de las Grandes Ligas, como por la transformación de vida que ha experimentado Pamela Infante.
El desenlace legal definirá el futuro de ambos, pero por ahora, el escándalo ha dejado una marca imborrable en sus vidas y en la historia reciente del béisbol profesional.
